La magia de creer para ver

sábado, 20 de julio de 2013

Un juego dadá

Una noche, hará algún tiempo, en Malasaña, hice con dos conocidas un juego poético en que las reglas consistían en lo siguiente: palabras al azar y suplantación de personalidad. Este es el texto que suplantando mi personalidad y con las palabras escogidas por mí misma al azar, creó Almudena. Cada persona conservó el texto con el que la otra persona pretendió suplantar su personalidad.


Alumbramiento verde
la vanagloria de lo inesperado
se tradujo en su cama reciclada
ese rotundo abismo de indefensión
Rómpeme
el desparpajo vacilante impuso ese
remasterizado encuentro políglota
Fe increíble
desgastados guijarros en la orilla
vagabunda, como su algodonoso secreto

No hay comentarios:

Publicar un comentario