La magia de creer para ver

lunes, 18 de febrero de 2013

Estaba

Estaba
la pizzca de higo en tu labio,

estaba
Jerusalén a nuestro alrededor,

estaba
el aroma de los pinos albares
sobre el barco danés que regraciamos,

yo estaba en ti.




De "Estancia del tiempo" Poesía póstuma
Paul Celan

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